Los espolones en los humanos son calcificaciones en el talón que pueden llegar a ser muy dolorosas. Y nuestros amigos perrunos también los padecen, pero poco tienen que ver con los que nos pueden salir en nuestros pies.
Los espolones, nos explica dogingtonpost.com son conocidos también como "el pulgar del perro" y se refiere a un dedo "residual" que se encuentra en el pie de la mayoría de los mamíferos. Normalmente crece en la parte alta de la pierna y no toca el suelo. El espolón está unido a la pierna con músculo y en pocos casos, con hueso. Muchas veces se eliminan cuando los perros son cachorros. Y es importante estar atento a esto especialmente en los primeros seis meses de vida para asegurarse que los espolones no interfieran con las actividades diarias de tu perrito.
No todos los perros nacen con espolones. Algunos sólo los tienen dos patas traseras y otros en las cuatro patas. En muchos casos hay perros con dos espolones en una misma pata.
Como es un dedo que presenta una uña, esta debe ser cortada y tratada como las otras uñas de los pies. El problema es que esta uña no se gasta porque no está a ras de suelo, entonces comienza a crecer desmedidamente enroscándose si no se le pone suficiente atención. De hecho, es más fácil que esta se encarne y pueda poner a tu perro en riesgo de infección y dolor. Es fácil olvidarse de su existencia y no cortarla, y esto pasa a menudo en perros de pelo largo a los que no les vemos el crecimiento de la uña del espolón. El otro problema que presentan es que al no estar necesariamente unidos al hueso, se pueden desgarrar.
En vetstreet.com nos explican que en muchos perros los espolones son eliminados en sus primeros días de nacimiento. En algunos casos para mejorar la apariencia (sobre todo en perros de concurso) y en otros para evitar lesiones. Si los espolones no se quitan en las primeras semanas, otro buen momento para ser removidos es cuando se le quiera hacer una esterilización o castración al perro. También si tu perro ya ha sufrido desgarros o infecciones por los espolones, tienes que discutir con tu veterinario para retirarlos. Si decides no quitarlos, tienes que tener en cuenta que debes prestarle más atención al cuidado y manejo de la uña. Hay perros que se ponen muy agresivos cuando se les cortan las uñas, así que el mantener el espolón corto y controlado puede ser un problema y quizás la opción más adecuada es retirarlos quirúrgicamente.
Decidir quitárselos o dejárselos debes tener en cuenta el cuidado adecuado y siempre acudir a un profesional para que te ayude en la decisión y realice el procedimiento de la manera adecuada.