El Tribunal de La Haya ha ordenado a Japón dejar de cazar ballenas con supuestos fines científicos. El país nipón ha asegurado que, aunque lo lamentan, esta vez acatarán la decisión. La caza de ballenas que ellos perpetraban era hasta hace poco realizada gracias a un vacío legal existente que se los permitía.
Japón argumenta que la caza de ballenas que ellos suelen llevar a cabo es con fines científicos, para estudiar a estos gigantes mamíferos, sobre todo en el ámbito de la reproducción, cosa que algunos grupos niegan, pues aseguran que para estudiar ese aspecto de las ballenas no es necesario matarlas, basta con extraer una pequeña porción de piel o grasa. Lo que sucede es que finalmente las ballenas luego de ser “estudiadas” terminan vendiéndose en el mercado para el consumo humano.
Esperamos que por fin se acabe con la matanza injustificada de estos hermosos animales, aunque aún nos queda mucho de qué preocuparnos respecto a los japoneses, pues ellos también son los principales depredadores de delfines y marsopas en las infames matanzas de Taiji.