Muchos animales sufren intensamente por la separación de una o más personas a las que se sienten apegados. Los especialistas definen que la ansiedad por separación se da en casos de hiperapego.
Si bien, la ansiedad por separación es más frecuente en perros, también se observa este padecimiento en gatos.
Los síntomas se relacionan a ciertos cambios conductuales que desarrolla el animal ante la auscencia de su persona de apego. Los signos se pueden dar cuando persibe que la persona se ausentará. En estos casos, el animal se pone nervioso, llora, se tumba en los pies de la persona, orina o ladra. Al encontrarse solo en casa, el animal con ansiedad tenderá a romper objetos como sillones, cortinas, cojines, rasguñar puertas o, incluso, si tiene la fuerza, despedazar puertas y tabiques.En casos graves es posible llegar a los vómitos, salivación excesiva y orines.
El recibimiento también nos puede indicar ansiedad, si el animal salta insistentemente, llora sin control, se monta sobre la persona negándose a dejarla. Si se trata de un perro, puede orinarse de alegría y, en el caso de un gato, puede orinar a la persona como una forma de "marcarlo". También es común que los felinos se "enojen" con la persona tras su ausencia ignorándola.
Es importarte observar si la destrucción del espacio se debe a una conducta de ansiedad o si lo hace por juego, esto sería principalmente, en el caso de animales jóvenes, que aprovechan la instancia de estar solos para "hacer sus travesuras".
En ocasiones la ansiedad por separación se produce luego de experiencias traumantes como haber sido golpeado, haberse extraviado, haber sufrido abandono o muerte de quien lo cuidaba.
Ante este padecimiento es importante acudir a un especialista. Se puede visitar al veterinario para recibir orientación. También se puede acudir directamente a un especialista en comportamiento, para que trate al animal afectado a fin de disminuir su sufrimiento. Es necesario entender que estas conductas no deben ser castigadas ya que esto solo aumenta la sensación de vulnerabilidad del animal.
Hay acciones que podemos tomar ante la ansiedad por separación, para ayudar al perro o gato que la sufre.
Antes de salir es bueno regalonear con el perro o gato y jugar con él. Además de sentirse querido, estará más cansado, bajando su nivel de actividad durante la ausencia.
Se puede enseñar al animal a quedarse solo mediante salidas programadas. Si la ansiedad es severa, se puede acudir a una persona de confianza con quien se deja encargado primero por diez minutos, luego veinte y se aumenta el tiempo gradualmente. Cuando se nota que el animal se queda tranquilo en compañía de otras personas, se repite la operación dejándole solo en casa de forma gradual.
Al llegar, se puede traer regalos sorpresa a nuestro animalito. De este modo, comenzará a asociar la salida con algo bueno. Es importante dar este regalo solo cuando el animal esté tranquilo, para no favorecer la conducta ansiosa.
La buena noticia, es que aunque la ansiedad por separación puede ser muy problemática, es posible modificarla con cariño, dedicación y ayuda de un especialista.
Imagen CC Thomassin Mickael