El lince ibérico ha logrado conseguir un tiempo más de vida, esto luego que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) publicara una actualización de la Lista Roja de especies en peligro, donde esta especie ya no estaba.
A final del siglo pasado, el lince ibérico estuvo muy cerca de extinguirse, así fue cuando comenzó a regir el Iberlince, un proyecto para preservar la especie, contando con fondos de toda la Unión Europea.
En 2002 habían 52 ejemplares de estos animales, según un catastro hecho en la nueva actualización, fueron 156 los linces que quedan en el país, hasta el 2012, lo que los saca de la categoría de peligro crítico de extinción.
Según la UICN, esto se logró "mediante acciones intensivas de conservación, que incluyeron la restauración de poblaciones de conejos, monitoreo del trampeo ilegal, cría con fines de conservación, programas de reintroducción y sistemas de compensación para los propietarios".
Pese al gran avance que se hizo por cuidar a estos felinos, los responsables de Iberlince seguirán trabajando, ya que aún existen muchos peligros para esta especie, como la gran cantidad de enfermedades asociadas a los conejos, el principal alimento de estos animales.