Bart, un gato oriundo de la paradisíaca cuidad de Miami en Estados Unidos, fue dado por muerto, y posteriormente, enterrado en el patio trasero de la casa donde acostumbraba jugar y compartir con su amo, Ellis Hutson.
El pequeño felino, que apenas tenía un año y medio de vida, fue atropellado por un auto y su dueño lo encontró sin signos vitales en medio de la calle. Ante eso decidió darle sepultura, cavando una tumba no muy profunda.
Al quinto día de haber enterrado a Bart, Hutson se encuentra con que su gato había vuelto a la vida, tras el aviso de su vecina, a quien el felino fue a pedirle comida después de haber estado bajo tierra. La mujer corrió a dar la noticia: "se lo llevé a su dueño, que abrió la puerta en estado de shock, porque sabíamos que el gato estaba muerto. No había una explicación lógica", señaló a un medio local.
Su dueño no estaba en condiciones de hacerse cargo de la recuperación de Bart, así que se contactó con la Sociedad Protectora de Animales de Tampa, quienes se hicieron cargo de la cirugía que necesitaba su gato. Hoy se encuentra en el Hospital Veterinario de la SHT, donde le están cuidando su averiada mandíbula y debieron extirparle un ojo.
Una vez que Bart esté recuperado del accidente, Hutson planea llevarlo de vuelta a casa, para que así pasen las seis vidas que le quedan a su amigo felino.
Increíble historia, ¿no?
Fuentes: Univisión - Minutouno
Imagen CC ivan