Arañas pollito: hermosas, peludas y solitarias

De todas las mascotas exóticas que se conocen, las arañas pollito son mis favoritas. Además de ser 100% nacionales (tarántula rosada chilena), son peludas y dóciles. Sí, dóciles pues extrañamente atacan, se alimentan de insectos vivos, no hacen ruido e hibernan, por lo que en el hay que asegurarles un buen refugio.

Ellas se alimentan de insectos como cucarachas, grillos, lombrices, también de otras arañas más pequeñas y de animales vivos como los ratones. Por lo que cualquier alimento que no se mueva, no lo comerán. También deben tener constantemente agua, cerciorándose de que el recipiente –con una esponja o algodón- no sea más grande que la araña, porque podría ahogarse.

Una de las principales recomendaciones es mantenerlas en un terrario (de vidrio o plástico) con tapa y que tenga una rejilla para mantener una buena ventilación. Además, esta tapa debe tener un gancho o guillotina que impida que la araña la levante. No se puede mantener al arácnido en una jaula porque las patas de la mascota pueden engancharse y lastimarse.

Asimismo, dependiendo de la especie, se debe tener alimento, temperatura, humedad y luminosidad específica. Sin embargo, todas necesitan arena o tierra, ramas, palitos y piedras para que se sientan en su hábitat natural.

No es una buena idea tener dos de estos animales en un mismo lugar, puesto que son muy territoriales, en consecuencia la araña más grande matará a la más pequeña.

Otro punto importante es que ellas mudan de piel al menos una vez al año, lo que les permite crecer. En este proceso, que puede durar aproximadamente una hora, son muy sensibles y delicadas, ya que deben esperar a que el exoesqueleto endurezca, por lo mismo, no comerán durante más o menos quince días. Debes sacar cualquier alimento que se encuentre en el terrario.

Hay que tener cuidado y respeto al momento de tomarlas, puesto que si se siente atacadas, soltarán su pelo lo que puede provocar daños en la piel. Se aconseja que las primeras veces sea con guantes y muy lentamente, hasta que la pequeña mascota se acostumbre a su manipulación.