¿Quieres adoptar un cachorro, pero temes la reacción de tu perro? Algunas veces la convivencia entre un nuevo cachorro y tu perro se logrará sin problemas, pero en otras ocasiones, la llegada del “intruso” puede convertirse en un dolor de cabeza para todos.
A continuación, te presentamos una serie de consejos útiles para lograr que tus perros sean mejores amigos.
Ser comprensivo con sus reacciones
Los perros son territoriales y defenderán su familia y su casa si perciben una amenaza. Debes intentar ser tolerante y paciente si las cosas no marchan como lo esperabas, recuerda que tu perro teme que dejes de cuidarlo por culpa del recién llegado. Considera también que los cachorros menores de 4 meses no interpretan el lenguaje corporal de los perros adultos, como las posiciones de las orejas, el movimiento de la cola y otras señales de alerta y agresividad. Si el asunto se desborda, será necesario conservar la calma y evitar o detener las peleas.
Escoger correctamente al nuevo cachorro
A la hora de escoger al nuevo integrante de la familia, debes tener en cuenta que será el compañero de tu perro actual. Examina su personalidad y considera si serán compatibles o no. Un perro anciano tendrá más reticencia a aceptar a un cachorro si este es demasiado juguetón. Además, recuerda que los cachorros tienen comportamientos habituales (como morder muy fuerte al jugar) que pueden desatar reacciones agresivas en un perro adulto.
Tener en cuenta raza y tamaño de ambos
Lo ideal es buscar perros de tamaños y similares para evitar que la fuerza física de uno ponga en peligro al otro en caso de conflictos. Esto no es determinante, todos conocemos canes de gran tamaño que son muy sumisos y verdaderos tiranos de razas pequeñas, pero será mejor tomar precauciones, ya que un caniche no pondrá en peligro la vida de un Gran Danés, pero sí puede darse la situación inversa. Las características de cada raza también son relevantes. Infórmate correctamente antes de elegir a tu nuevo cachorro.
Realizar la presentación en un lugar neutro
Por la misma territorialidad que mencionábamos antes, no es buena idea llevar al cachorro al territorio de nuestro perro. Lo ideal para lograr la buena convivencia entre un nuevo cachorro y tu perro sería buscar un sitio nuevo para los dos, como puede ser la casa de un amigo o un espacio abierto y darles tiempo para que se reconozcan, siempre con sus correas colocadas. En este momento, es fundamental estar atento al lenguaje corporal del perro mayor, para evitar agresiones o peleas. Luego, cuando veamos que todo marcha bien, será hora de volver todos juntos a casa.
No olvidar ni dejar de lado al viejo amigo
La llegada de un cachorro genera excitación y ganas de jugar siempre con él. Puede suceder que, sin querer y sin darnos cuenta, dediquemos cada vez menos tiempo y atención a quien antes era el único rey del hogar. Para evitar los celos y la agresividad de tu perro mayor, dale tanta atención a él como al recién llegado, y reserva tiempo para estar a solas con él.
Precauciones a la hora de la comida
Como medida fundamental, no permitas que compartan el mismo plato. De ser posible, alimenta a cada uno por separado. Si tu perro anterior es de edad avanzada o se alimenta lentamente por otros motivos, será mejor colocar su plato en otra habitación para evitar que el cachorro invada su espacio o robe su alimento.
Controlar el comportamiento, en especial durante los primeros días
Aunque todo marche bien el día de la presentación, no te distraigas. Controla el desarrollo de la relación e intenta no dejarlos solos durante mucho tiempo en las primeras dos semanas. Si en ese lapso no surgen conflictos o peleas, vas por el buen camino en tu tarea de lograr la correcta convivencia entre un nuevo cachorro y tu perro.
Sumar un nuevo integrante a la familia puede ser un cambio muy positivo para todos, incluso para tu antiguo perro. Tú recibirás el doble de amor de tus mascotas y tu perro tendrá con quién jugar y ya no se quedará solo cuando sales a trabajar o a estudiar. Pero no lo tomes a la ligera: si estás pensando en adoptar un cachorro, hazlo con conciencia, mucha responsabilidad y con la seguridad de estar bien informado para no cometer errores.