El Pangolín es un animal sumamente extraño. Es un mamífero perteneciente a la familia Manidae y es autóctono de Asía y África, específicamente de las áreas tropicales de estos continentes. El nombre real y científico es Pholidota, que en griego antiguo significa "cubierto de escamas". Sin embargo, vulgarmente se le conoce como Pangolín. Esta palabra proviene del malayo "pengguling" que literalmente significa "Rodillo".Todos estos nombres son perfectos, debido a sus características físicas. Existen varias subespecies, pero todos comparten muchas características.
Este animalito, que a simple vista parece un armadillo, puede llegar a medir de 10 hasta 85 centímetros, dependiendo la especie. El peso también es variable, aunque se han encontrado ejemplares que llegaron a pesar 33 kilogramos. Lo que más caracteriza a este simpático "rodillo" son la inmensidad de escamas que cubren su cuerpo, menos el vientre y la cabeza. Por culpa de estas escamas, los Pangolines pueden tener una apariencia de piña o alcachofa con patas, aunque realmente lo que posee es una armadura que sirve de defensa ante posibles depredadores. Por esto mismo, cuando se sienten amenazados, se enrollan en una esfera y dejan sus escamas más filosas a la vista, para que así el atacante no se atreva a forzar dicha armadura. Es un sistema defensivo muy eficiente, ya que si el depredador trata de atacarlo, el pangolín es capaz de mover las escamas y provocar heridas profundas en su enemigo. También tiene patas cortas y garras muy afiladas que lo ayudan a encontrar su alimento en la tierra.
Otra característica esencial en esta rara especia es su lengua. Es extremadamente larga, ya que comienza en la parte abdominal y en las costillas, por lo que su longitud puede superar con creces el doble que el largo de su cabeza. Los pangolines son animales solitarios, nocturnos y muy tímidos. Viven en madrigueras y casi no salen de ellas. Comen mayormente insectos, como termitas y hormigas. Su lengua lo ayuda en ese sentido, ya que ataca los nidos de estos insectos de una forma muy parecida a como lo hacen los osos hormigueros.
Varias subespecies de pangolines están en peligro de extinción, Esto se debe a que su carne es considerada un manjar dentro de varias creaciones gastronómicas en África y Asia. También se cree que sus escamas tienen poderes medicinales y también ha sufrido el tráfico de especies. Esto puede desencadenar en riesgos latentes de extinción de este animalito en un futuro no muy lejano.
¿Curioso, verdad?