La Semana Santa está a la vuelta de la esquina y los fanáticos del chocolate empiezan a salivar. Los niños se vuelven locos buscando los huevitos de pascua. El problema es ¿qué pasa con los huevos que nadie encuentra?. Bueno, el problema es que suelen encontrarlos nuestros perros, lo que podría ser altamente perjudicial para ellos.
El chocolate contiene una sustancia llamada teobromina, la cual se obtiene de la planta del cacao. Para el ser humano ésta no presenta ningún riesgo, pero para los perros es dañina, e incluso en algunos casos tóxica. Los perros no poseen los mecanismos necesarios para eliminarla de su sistema y ésta normalmente les causa una gastroenteritis.
La teobromina, el contenido que hace dañino el chocolate para nuestros perros, no los afecta por igual. Un perro grande puede comer cantidades mucho mayores que un perro pequeño. Al mismo tiempo, no todos los chocolates contienen la misma cantidad de teobromina. Los chocolates con mayor concentración de cacao como el amargo, el chocolate para cocinar y el cacao mismo son los que tienen un nivel más alto. Por otro lado, el chocolate con leche y el blanco, tienen la más baja. Si por algún motivo nuestro perro llega a comer grandes cantidades de chocolate, lo mejor es inducir el vómito y llevarlo a un centro veterinario lo más rápido posible. (fuente: Hillspet)
Los perros aman el chocolate, la cantidad de azúcar que tiene este alimento los vuelve loco, por lo que sí lo encuentran, se lo comerán.
Una buena manera de incluir a los perros en esta celebración sin causarles un daño, es comprándoles snacks especiales que ahora abundan en el mercado o preparándoles algo casero. Sin lugar a duda disfrutarán en grande igual que todos comiendo chocolate, pero a salvo del peligro que representa el chocolate para nuestros queridos amigos de cuatro patas.