Este video fue grabado en el verano del 2015 en la Isla de Baffin del archipiélago ártico canadiense, y se puede observar como un macho persigue a un pequeño oso polar mientras su madre intenta evitar el ataque.
Imágenes fuertes, se recomienda discreción.
Las focas, de quienes se alimentan los osos polares, no poseen branquias, por lo tanto, solo se sumergen en el océano para cazar su comida. Normalmente pasan la mayor parte del tiempo posadas sobre el hielo y si hay depredadores cerca, buscan o construyen respiraderos, que son espacios debajo o entre el hielo que les permiten respirar sin tener que salir del agua, para impedir que los osos polares las vean.
El calentamiento global, un fenómeno causado por el hombre, y que ha aumentado las temperaturas en todo el planeta, está destruyendo el hábitat de las focas árticas y los osos polares, como consecuencia del derretimiento 45.000 kilómetros cuadrados de la capa de hielo estacional cada año.
A los osos se les ha dificultado la tarea de cazar focas por la gran disminución de su población en manos de los humanos (otra vez nosotros), que les quitan su piel y grasa para venderlas; y porque ellas se encuentran la mayor parte del tiempo en el agua, desplazándose de un lugar a otro en busca de bloques de hielo para descansar.
Esta falta de alimento ha desencadenado una conducta caníbal entre los osos polares. Los machos son, en tamaño, casi el doble de grandes que la hembras, y sus requerimientos nutricionales son mucho más exigentes, es por esto que atacan a pequeñas crías para no morir de hambre. Este comportamiento es menos usual en las hembras, y en la mayoría de los casos conocidos, no asesinaban a las crías, sino que se las comían luego de que murieran de hambre o alguna enfermedad.
Focas y osos se encuentran el peligro de extinción y una de las causas, es que las hembras prefieren las cuevas de hielo para dar a luz y el aumento en la temperatura ambiental provoca que estos sitios se derrumben con mucha frecuencia, exponiendo a las crías a los depredadores y humanos. Además, la escasez de comida dificulta el proceso de amamantamiento y las crías mueren prematuramente por desnutrición.
Los cambios climáticos están amenazando la vida de muchas especies de animales y si las condiciones no mejoran, se proyecta que la fauna del ártico podría desaparecer por completo.
¿Como podemos ayudar a detener esto? No comprando cosas innecesarias, comprar aquellos productos que tienen empaquetados más simples, comprar con bolsa de género, reciclando y reutilizando todo lo que se pueda, evitar los medios de transporte contaminantes en la medida de lo posible, no comprar abrigos de piel, disminuir (o mejor aún erradicar) el consumo de carne (la industria ganadera es una de las principales contaminantes), no dejar artefactos eléctricos prendidos cuando no se están utilizando, ducharse menos tiempo, no dejar el agua corriendo innecesariamente... En fin, hay muchas maneras de cuidar el planeta, y como ves, nuestras acciones repercuten en todos los seres vivos, por lo tanto, todo granito de arena aporta.