Son animales solitarios y sensibles, pueden parecer gruñones pero con un poco de paciencia los erizos de tierra no tardarán en abrirse. Pueden parecer un misterio pero lo cierto es que son encantadores. Son juguetones, les encantan los insectos, lamerse y olfatear por todos lados ¡Son perfectos!
- Púas
Si bien no son sencillas de acariciar, el cambio de púas bebés a las de adulto son todo un suceso para los dueños. Algunos las recogen y guardan como si fuesen los dientes de su retoño.
2. Hacerse bolita
Los erizos de tierra se hacen pelotita cuando se sienten amenazados y hay que evitar que eso ocurra. Pero cuando pasa ¡Se ven muy dulces! Después de un tiempo, con paciencia, se lograrán acostumbrar a nosotros.
3. Duermen de dia
Durante el día se la pasan durmiendo y flojeando, bien escondidos de nuestros ojos, pero de noche comienza la fiesta. No se les debe despertar antes para no dañar sus horarios naturales.
4. Comen con el hocico abierto
Los erizos de tierra suelen hacer bastante ruido cuando comen, la comida se les cae y podemos ver sus preciosos pequeños dientes. Si se les entrega un tenebrio, este parecerá desaparecer por arte de magia.
5. Juegan con conos
Basta entregarles un cono ya desocupado y jugarán durante horas con el. Subirse, intentar meterse dentro, morderlo, llevarlo de un lado a otro.
6. Mueven la nariz
Una vez despiertos y activos durante la noche, moverán su nariz de un lado para otro, oliendo cada esquina y a cada persona que se le acerque ¡Cuidado! Si tienes un olor peculiar, podría morderte "por accidente".
7. Ungimiento
Cuando encuentran un olor o sabor que le agrade, lo morderán y procederán a hacer una espuma con su hocico para luego esparcirla en su cuerpo. Suelen doblarse para alcanzar ciertas partes, siendo muy entretenido de ver.
¿Quieres aprender más sobre los erizos? Lee este artículo y si lo llevas de vacaciones contigo, no olvides revisar estos consejos para que este lo más cómodo posible.