La primera comida de todo cachorro debería ser el calostro, la rica leche inicial que provee anticuerpos para protegerlo de cualquier enfermedad que pueda contraer en su vida. Sin embargo, si un cachorro recién nacido queda huérfano o su madre no puede proveer leche, es tu tarea hacerlo. En caso de una emergencia, puedes hacer un reemplazo de leche materna con cosas que puedes encontrar en un supermercado.
Lo mejor para un recién nacido es la leche de su madre, si él no puede obtenerla de su propia madre, puedes llamar a un veterinario para ver si tiene calostro canino o si conoce alguna madre nodriza canina que pueda aceptar a tu cachorro. Si esto no es posible, tu mejor opción es comprar un reemplazo de leche materna comercial, que puede ser encontrado en cualquier veterinaria o tienda de mascotas. La leche materna comercial contiene todos los nutrientes que necesita un cachorro. Pero si en algún momento, en medio de la noche te das cuenta de que tu cachorro necesita leche, como emergencia, puedes preparar una leche casera para reemplazarla.
El hospital animal Parkway en California posteó esta receta de leche en su página web, pero enfatiza que debe ser usada solo hasta que puedas comprar el reemplazante comercial. Consiste en 1 taza de leche entera, 2 yemas de huevo, 1 cucharada de aceite y una gota de algún liquido multivitamínico que tengas y mezcla los ingredientes en una batidora. Ya sea leche casera o comercial, solo debes preparar leche para 1 día, y desechar lo que quede.
La universidad de Minnesota creó otra receta similar para emergencias, basado en lo que podrías tener a mano. Puedes mezclar 3 partes de leche en polvo entera con 1 parte de agua. La segunda receta es idéntica a la del Hospital animal de California pero sin huevos. Una tercera recomendación es media taza de leche entera, media taza de agua, 1 ó 2 yemas de huevos, algún suplemento de calcio, una cucharadita de aceite vegetal. Una cuarta opción es mezclar 1 taza de leche entera, 1 cucharadita de aceite vegetal, una pizca de sal, 3 yemas de huevo y una gota de alguna vitamina para niños. Consulta a tu veterinario para saber cuál de estas recetas va mejor con tu mascota dependiendo de la edad y tamaño.
Una vez que has mezclado tu leche de emergencia, debes cuidadosamente alimentar a tu mascota, a las 2 semanas de edad o menos, los cachorros deberían comer cada 3 o 4 horas. De acuerdo al American Kennel Club, la leche debe ser dada a temperatura corporal. La mejor forma de hacer esto es poniendo el pote donde esta leche en una olla con agua tibia y luego pones unas gotas en tu mano o muñeca para estar seguro de que no esté muy caliente. Si no tienes una mamadera, puedes usar un gotero. Toma al cachorro suavemente, manteniéndolo tibio, mantén su cabeza arriba mientras él está acostado en su estómago, de igual manera a como estaría al estar amamantando de su madre. Si la leche sale de su nariz, es porque está tomando muy rápido, después de alimentarlo, tómalo y con su cabeza sobre tu hombro, acaricia suavemente su espalda para que pueda eructar.