No solamente los humanos podemos sufrir de sobrepeso o desnutrición. Nuestros peludos amigos también pueden pasar por etapas en donde no se encuentren en un peso saludable y es nuestra responsabilidad como dueños poder detectar esta situación y corregirla.
Siempre lo más recomendable es llevarlos al veterinario si es que notamos un cambio importante, ya sea en el peso o en otra situación, pero hay dos maneras sencillas de detectar nosotros mismos si nuestro perro o gato se encuentra demasiado flaco. Debemos pararnos junto a nuestra mascota y hacer dos cosas: tocar y mirar.
Primero, debemos observar a nuestro peludo desde arriba. Si el gato o perro está demasiado delgado, se le notará excesivamente la cintura, los huesos de las caderas y las costillas. Al mirarlo de lado, a un perro o gato sano no se le deberían notar sus costillas y deberíamos observar masa muscular.
Lo segundo que haremos, será palpar a nuestro animal. Las costillas en un perro o gato en su peso normal se sienten con facilidad, pero si éstas son demasiado prominentes al tacto, nuestra mascota podría estar demasiado delgada.
Hay varias razones por las que un perro o gato puede encontrarse en un peso bajo. La principal, es cuando tienen parásitos, por eso es importante llevarlo a un veterinario que disipe nuestras dudas. También se puede deber a que está comiendo poco, ya sea porque no le gusta la comida o se encuentra deprimido. Algunos perros y gatos no comen algo que no les gusta aunque tengan hambre, así que si cambiamos su alimento de un momento a otro debemos fijarnos si se lo está comiendo o no. Un animal deprimido también puede dejar de lado la comida y en ese caso debemos preocuparos por saber qué le está pasando a nuestro amigo, si se siente ansioso, siente miedo o abandono, debemos ver qué cambios han ocurrido en su rutina que lo podrían estar afectando. Pero también tenemos que tener en cuenta que hay perros como los galgo (en la foto) que son por esencia delgados, así que si tienes un perro de alguna raza en especial debes estar al tanto de las características de ésta. Otra razón por la que puedan estar bajos de peso es que simplemente no les estás dando la cantidad de comida suficiente. Debes consultar con tu veterinario, ya que la cantidad de alimento debe ser proporcional al tamaño y a la energia que gasta el animalito.
Una vez detectada la razón por la que el perro o gato está muy delgado, procederemos a realizar un tratamiento para que aumente de peso. Por lo general, esto incluye ordenar sus comidas dividiéndolas en varias porciones pequeñas a lo largo del día. Darle mucha comida de una sola vez puede causar problemas digestivos, por lo que no es recomendable.
En casos más extremos, nuestro veterinario podría recomendar algún alimento especial para ayudar a que nuestra mascota suba de peso, pero siempre consultalo con el profesional primero antes de proceder.
No debemos desesperarnos si encontramos que nuestro animalito está muy delgado, el peso de los animales también puede variar y con los tratamientos adecuados podemos mantener su salud en óptimas condiciones.