Los parásitos más peligrosos en gatos

Cuando tenemos una mascota tenemos que velar por mantenerlos alimentados, felices, en ambientes donde se desarrollen y sobretodo, seguros. Y una de las cosas que tenemos que cuidar es su salud y el ataque de parásitos que pueden poner en peligro su vida.

En el caso de los gatos, hay varios parásitos con los que tenemos que luchar:

Toxoplasmosis: Quizás una de las más comunes o conocidas de las enfermedades parasitarias que pueden afectar a tu gatito. Esta enfermedad es causada por el parásito Toxoplasma gondii (T. gondii) y puede afectar a muchos seres pero los gatos son los que se llevan la mayor parte. Según Petmd.com el gato puede estar afectado tanto de manera crónica como aguda y a veces es más sintomático en esta última. Sus signos son letargo, depresión, pérdida de peso, dificultades de la respiración, debilidad muscular, vómito, diarrea, parálisis entre otros. La principal causa de la infección de toxoplasmosis es la contaminación del suelo con heces previamente infectadas. Su tratamiento muchas veces implica hospitalización para hidratar al gatito y antibióticos para controlar la infección. Pero aún así, si la mascota ya presenta avanzados síntomas y el sistema inmune está comprometido, la esperanza de recuperación no es favorable. Como esta enfermedad se adquiere por comida y suelo contaminado, la mejor prevención es la higiene. Darle a tu minino comida lista, si es natural debe estar muy bien lavada y si tu gato es de los que les gusta salir, debes estar pendiente de los alrededores que suele visitar.

Coccidiosis: Es una infección causada por el parásito intestinal llamado Coccidia que puede atacar a los gatos (y a los perritos también) sobre todo cuando están cachorros. Se caracteriza por una diarrea de apariencia mucosa que puede dañar el tracto intestinal del gatito. Cuando la infección avanza, esta diarrea es difícil de controlar y puede haber defecación con sangre. El gatito va a mostrarse letárgico febril, a veces con vómito y esto además puede llevarlo a la deshidratación y si está no es tratada, también a la muerte. La causa más común de contaminación es el estar con otro animalito infectado, a través del contacto con sus heces (ya que pueden jugar con las heces de otros gatos) y también cuando comen o muerden a ratones, pájaros y animalitos contaminados. Es muy peligrosa para gatos cachorros porque su sistema inmune no está completamente desarrollado pero también puede ser peligrosa para gatos mayores. Si tu gatito es contagiado con este parásito normalmente se le prescribe un medicamento con base de sulfuro y el tratamiento es efectivo. Lo más peligroso es que el parásito haya avanzando mucho y se haya comprometido sus intestinos o esté muy deshidratado. La mejor prevención es mantener los animales infectados aislados. También se puede hacer una prueba preventiva de las heces de la gata mientras está embarazada, o después de haber dado a luz, para ayudar a proteger a los recién nacidos de la infección.

Gusano del corazón: Esta enfermedad también puede atacar tanto a perritos como gatitos, y es muy grave porque ataca los pulmones, corazón y vasos sanguíneos del animalito. Según Cat-World.com es causada por el parásito Dirofilara immitis, y es potencialmente fatal. Los síntomas más comunes son tos, respiración dificultosa, silbido al respirar, falta de apetito, pérdida de peso, vómito, y letargo. Lo malo de esta enfermedad es que muchas veces se diagnostica muy tarde y se transmite a partir de la picadura de un mosquito infectado. Cuando se diagnostica la enfermedad, se tienen que hacer radiografías del tórax y estar al tanto de su evolución. Muchos necesitarán hospitalización para darle líquidos de forma intravenosa, terapia de oxígeno, medicamentos cardiovasculares y antibióticos. La mejor manera es la prevención, trabajando en una dieta saludable para el fortalecimiento del sistema inmune y eliminando las fuentes de mosquitos sobretodo en los meses de verano donde pueden abundar más.

Cabe mencionar que lamentablemente estos parásitos no se pueden prevenir con la vacunación, sólo con los cuidados antes mencionados. No es cuestión de mantener a nuestras mascotas encerradas pero si de tratar de buscar las maneras de que esté sano y nos acompañen de esta manera por mucho tiempo.