Decidir tener un acuario puede significar todo un desafío, ya que no sólo debemos preocuparnos del lugar en donde lo pondremos, sino que además tenemos que informarnos e instruirnos para que el acuario que escojamos cumpla la función ornamental que esperamos y nosotros le otorguemos a los peces el mejor ambiente para vivir.
Como futuros acuaristas , la primera pregunta que debemos hacernos es: ¿qué tipo de acuario quiero, puedo o debo tener?. Para responder esta pregunta debemos considerar que existen 3 tipos de acuarios que podemos tener en casa:
- Acuario de peces de agua fría: goldfish o carassius, peces koi. Este tipo de acuario es el más fácil de mantener ya que utilizamos agua directamente de la llave. Estos peces son bastante resistentes y en el mercado podemos encontrarlos en diferentes tamaños. Para mantener este tipo de acuarios, debiéramos "idealmente" tener una bomba de oxígeno y un filtro interno o externo que nos ayude a mantener limpia el agua (todo esto proporcional a la cantidad de litros del acuario). En términos estrictos estos peces podrían vivir sin filtro y sin bomba ya que suben a la superficie a respirar, pero la idea es siempre buscar el mejor ambiente para no interferir en su bienestar.
- Acuario de peces tropicales: existen una amplia variedad de peces que pueden vivir en este ambiente, entre ellos: cardenales, peces espada, guppy, molly, escalares, corydoras, peces disco, neones, plecostomus, etc. Para tener estos peces debemos formar un acuario más complejo que cuente con un termostato que mantenga la temperatura entre rangos de 24-26 °C, un filtro interno que permita la formación de bacterias benéficas y limpie el agua y una bomba de oxígeno. Todos estos implementos deben ser de un tamaño proporcional a la cantidad de litros del acuario. Es muy importante otorgar un ambiente lo más parecido posible al real con plantas naturales o artificales, rocas y luz.
- Acuario de peces marinos: este tipo de acuarios es el más complejo de tener ya que las condiciones para mantener este tipo de peces son más estrictas y generalmente se recomiendan para personas que tengan conocimiento previo, que hayan pasado por los dos tipos anteriores. Estos acuarios deben mantener temperatura especial, densidad del agua y concentraciones de sal que permitan un desarrollo marino. Los peces que pueden vivir en estos acuarios son entre otros, los peces payaso, peces cirujano, anémonas, damicela, pez león, ángel, mariposa, cangrejos, etc.
Una vez que decidimos qué acuario es el más apropiado, debemos escoger el tamaño del acuario. Este tema es muy importante, ya que dependiendo del tamaño serán los litros de agua y la cantidad de peces que allí podrán habitar. Por supuesto el tamaño debe tener relación con el lugar donde queremos ponerlo y considerar las mantenciones que debemos realizar para que el agua este siempre limpia y los peces en un ambiente lo más óptimo posible. En términos generales para calcular la cantidad de litros que hace mi acuario debemos multiplicar largo x alto x ancho dividido en 1000 y la proporción ideal debe ser 1cm de pez por litro de agua. Por ejemplo, si mi acuario tiene 20 cm de alto x 50 cm de largo x 30 cm de ancho/ 1000 = 30 litros. Con la cantidad de litros conocidos podremos comprar los peces.
Ahora debemos armar nuestro acuario en casa. Independiente de que tipo de acuario escojamos siempre debemos comprar anticloro para sacar el cloro del agua potable. La cantidad a agregar son 2 gotas por litro. Si escogemos un acuario de peces tropicales debemos considerar que estos peces necesitan una población de bacterias benéficas presente en el acuario antes de llevar los peces, esto quiere decir que debemos dejar funcionando nuestro acuario con todo lo necesario (calefactor, bomba, filtro) durante dos semanas y luego llevar los peces. Los acuarios de agua fría pueden ser puestos en marcha de inmediato. Es importante considerar ambientar paulatinamente a los peces a su nuevo ambiente, para esto, debemos dejarlos en la bolsa flotando unos 20 minutos antes de depositarlos en nuestro acuario, así minimizamos el estrés. Los peces deben tener 12 horas de luz y 12 de oscuridad, ser alimentados en muy pequeña cantidad 2 veces al día (una pizca) y los cambios de agua deben ser parciales (25%), nunca totales para no perder el microambiente bacteriano que los beneficia, este cambio en acuarios menores de 100 litros debe ser cada una semana y en más de 100 litros cada 15 días.
Este es un gran mundo, adictivo para quienes lo conocen, siempre querrás saber más. Si bien aparenta ser complicado, es mucho más simple de lo que parece, sólo hay que tener las ganas e informarse. Atrévete y comienza con lo más básico, aprenderás y podrás sofisticar tu acuario llegando a un maravilloso mundo que solo entregará placer y relajo para quienes puedan disfrutar de su belleza.