El Pastor Ganadero Australiano, es una raza especialmente creada para este tipo de tarea. Luego de varios intentos por lograr un can que cuidara a las reces en las montañas de Australia y Estados Unidos, en 1840 se cruzaron Highland Collies de pelo azul, provenientes de Escocia, con Dingo. De esta cruza salieron perros trabajadores y silenciosos. Pero aún incorporaron más razas para llegar a los ejemplares que conocemos ahora. Se incluyeron los Dálmatas, para mejorar su fidelidad a los amos y los Kelpies, para reafirmar sus habilidades para el trabajo.
Luego de tantos esfuerzos, el resultado de las mezclas entre razas fue un perro cauteloso como el Dingo, confiable como un Dálmata, hábil como el Collie y el Kelpie y dueño de un pelaje de un color único en el mundo.
Debido a que estos canes son excelentes trabajadores y se adaptan fácilmente a las distintas actividades que se le encomiendan, se han empleado como perros de rescate y búsqueda, detección de bombas y drogas así como también se han utilizado como perros de servicio, además por supuesto de ser especialistas para la tarea que fueron creados, el pastoreo.
Los Pastores Ganaderos Australianos son físicamente muy equilibrados y de musculatura fuerte, llegando a medir 50 centímetros y pesar 22 Kilos. Parecen pintados a mano. Su pelaje es suave y de doble capa, lo que lo hace más resistente a las bajas temperaturas. Los podemos encontrar en distintos colores: negro azulado (en distintas gamas, por ejemplo entrecano, negro, con motas, etc) o rojo (el color debe ser parejo en todo el cuerpo).
Debido a que fueron desarrollados para el trabajo en grandes extensiones de tierra, estos hermosos canes, no son aptos para estar en espacios reducidos ni para permanecer solos en un patio. Ellos necesitan de la convivencia con los humanos y de mucho ejercicio. Si no se les entregan estas condiciones, pueden llegar a ser muy destructivos, ya que necesitan hacer trabajar su cuerpo y su mente. Por ello, además de entregarle compañía, ejercicio y cuidados, es recomendable entrenarlos por medio de incentivos para que aprendan más fácilmente.
Estos hermosos pastores, son ideales para compartir con la familia, pero son desconfiados con los extraños, por lo que resultan estupendos guardianes.
Son perros muy sanos, pero algunos ejemplares son proclives a presentar displasia de cadera, atrofia progresiva de retina y sordera.
Su hermoso pelaje requiere de cepillarlo una vez por semana y bañarlo una vez al mes, para mantenerlo en buenas condiciones.
Una vez que lo tengas en tu hogar, te vas a hacer un fanático de la raza. Recuerda que como todas las mascotas, necesita de una buena alimentación y el control periódico de un veterinario.