Los hurones son mamíferos carnívoros. Son parientes de los visones, los armiños, las martas, etc. Todos ellos excelentes cazadores, que en su ambiente natural se alimentan principalmente de pájaros y roedores. A pesar de que existen muchas especies, los domésticos pertenecen sólo a una, el Mustela furo, que no vive en estado salvaje en ninguna parte del mundo. Podemos distinguir entre machos y hembras, principalmente por su tamaño, ya que ellas son mucho más pequeñas, superando escasamente el kilo y medio de peso y unos 30 cm. Los machos, por su parte, pueden pesar hasta 3 kilos y pueden llegar a medir casi 40 cm.
Los hurones eran utilizados para el control de plagas desde el año 3000 antes de Cristo, debido a su natural habilidad para cazar ratones. Con el tiempo, se fueron convirtiendo en tiernos animales de compañía; pero su instinto no ha desaparecido por completo, como en el caso de los gatos, por ejemplo.
Estos hermosos pequeños son considerados animales exóticos y como tal, requieren de cuidados específicos. También hay que tomar en cuenta que necesitan el contacto humano, por lo que se les debe dedicar el tiempo que necesitarían por ejemplo un perro o un gato. Precisamente debido a su instinto cazador, son muy juguetones e inquietos.
Podemos alimentarlos con huevos, carne, algunas frutas, etc., pero resulta más difícil equilibrar su dieta, por lo que es recomendable darle comida para gatos, que es la que más se acerca a sus necesidades nutricionales.
A pesar de que le entreguemos una alimentación adecuada, ésto no impedirá que si tenemos en casa un hamster, conejo o cualquier tipo de animal pequeño, puede sentirse tentado de atacarlo, por lo que debemos tener especial cuidado en mantenerlos lejos de él.
También debido a su pasado cazador, es un animal extremadamente curioso, por lo que hay que tener en cuenta que algunos lugares de nuestra casa, pueden ser peligrosos para él, porque TODO lo va a explorar y es muy posible que trate de mascar cables de corriente; por eso, hay que tener cuidado con: la parte de atrás del refrigerador, desagües, trituradores de basura, etc. También es conveniente que proteja sus plantas, ya que les encanta cavar , así es que le recomendamos que ponga piedras o rejillas que impidan que su jardín termine destrozado.
Debido a su espíritu inquieto y curioso, es mejor que si lo va a dejar solo, lo ponga en una jaula cómoda mientras regresa, ya que se adaptan muy bien a estos espacios, pero a penas regrese hay que dejarlos en libertad, ya que el hurón no es un animal que pueda estar encerrado todo el tiempo.
Son excelentes compañeros cuando reciben los cuidados necesarios y necesitan mucho de sus mimos, por lo que si no cuenta con el tiempo necesario para compartir con él, es mejor optar por otro tipo de mascotas.
Si te decides a adoptar un hurón como mascota, descubrirás además sus innumerables habilidades, lo que lo convierte en una mascota muy especial e inolvidable.
Imagen CC: EvaSan