La alimentación de un cachorro es distinta a la de los adultos, ya que debe ser aún más completa y cargada de energía, para que se desarrolle correctamente, por lo que es muy importante que haya finalizado su etapa de crecimiento cuando la cambies. Sin embargo, no hay una fecha exacta para ésto, ya que depende de la raza de tu mascota, por ejemplo, las razas pequeñas finalizan su crecimiento a los 10 meses; las razas medianas, al año de edad y las grandes, a los 18 meses.
Cuando haya llegado el momento, deberás buscar el alimento adecuado para tu mascota, tomando en cuenta que además de ser para adultos, sea el indicado para su raza, peso, etc.
El cambio de alimento, debe ser paulatino, ya que hay que preparar poco a poco su estómago para que tolere esta nueva combinación de nutrientes, que necesitará para su vida adulta. Deberás sustituir 1/4 de tasa de su comida de cachorro por una de adulto y el resto de su porción mantenerla de cachorro, durante una semana; a la semana siguiente, agregar 1/4 de tasa más de reemplazo y continuar así hasta que completes su porción con comida de adulto (recuerda ver bien cuál es la porción que le corresponde de esa comida como adulto).
A pesar de que debiera ser fácil, no todos los cachorros se adaptan tan rápidamente, algunos se dan el trabajo de separar la comida antigua de la nueva, por lo que te daremos unos consejos para que te ayuden en este tránsito.
- Fija horarios para sus comidas y una vez que haya pasado el tiempo para su alimentación, saca el recipiente de la comida. Ésto te ayudará a que sepa que ese es el momento en el que tiene que comer y que si no lo hace, va a tener que esperar varias horas, por lo que se preocupará de quedar sin hambre cuando le ofrezcan la comida. También, ayudará a que regule su digestión y puedan formar hábitos en este importante punto.
- A veces, sienten que su nueva comida es muy dura para sus dientes, por lo que puedes remojarla un poco con agua tibia, para que sea más apetitosa para él.
- Si ves que tu mascota no se interesa por esta nueva comida, puedes agregarle una cucharadita pequeña de mantequilla y untarla en el alimento, ya que el olor de la mantequilla resulta muy atractivo para los perros.
- Asegúrate de mezclar muy bien las dos comidas para que le cueste mucho separarlas y si las remojas un poco (como te comentábamos) va a ser aún más dificil para él, si además tomas en cuenta que va a disponer de un tiempo para comer, no va a estar dispuesto a invertir minutos en separarla y preferirá comer tal cual le presentan su alimento.
Imagen CC: cyfuss