Algunos animales son como verdaderos niños, ¡les cuesta un montón separarse de su mamá! Ese fue el caso de 'My', un adorable bebé chimpancé que por ningún motivo dejó que lo apartaran de su madre, Jutta, cuando iba ser sometida a una cirugía.
Producto de una posible futura infección, los veterinarios debían quitar todos los dientes a la chimpancé de 40 años, y para ello, era necesario anestesiarla.
A pesar de que en un comienzo la operación parecía bastante sencilla, el pequeño 'My' insistía en aferrarse a Jutta y los veterinarios se dieron cuenta de que iba a ser muy difícil apartarlo.
Fue entonces cuando decidieron iniciar la operación con el primate menor dentro del quirófano, ya que su presencia no molestaba y así evitaron generar mayor tensión en el animalito.
"El chimpancé bebé estaba nervioso y también se veía que estaba intentando proteger a su madre, después de que se quedara dormida por la anestesia. Al final, decidimos dejarlo junto a su madre mientras la operábamos, ya que podíamos trabajar igual", explicó uno de los tratantes.
Finalmente, la operación resultó exitosa y tanto madre e hijo permanecen juntos en el zoológico de Dinamarca, donde habitan.
¡Qué ternurita! :)
Fuente e imágenes CC Schnauzi