Si hablamos de un perro tierno, peludo y atractivo, lo primero que se nos viene a la cabeza es el Pomerania; una singular y distinguida raza que llama la atención por su particular aspecto, que resulta ser muy parecido al de un peluche de juguete. Estos pequeños caninos suelen ser muy energéticos, ágiles, alegres y fieles compañeros.
Los perros de esta raza, que son perteneciente a la familia Spitz, pueden llegar a ser unos verdaderos encantos. De buenas a primeras se ven amigables y adorables, pero cuando se les acerca algún extraño, se defienden ladrando y así mismo lo hacen cuando ven que sus amos son rodeados por desconocidos.
Pomore, que significa "junto al mar", fue el nombre que recibió esta raza que proviene de Pomerania Central, la región ubicada en Alemania oriental. Este pequeño can es reconocido por su abundante pelaje con doble capa, por sus orejas pequeñas, su cabeza triangular, por el rostro parecido al de un zorro, y por su escaso peso, que puede ser entre 1.5 y un poco más de 3 kilos.
En relación a su temperamento se caracterizan por ser leales, protectores, activos, mimados, inquietos, inteligentes y algo esquivos. Se pueden convertir en un aliado perfecto de compañía y en el amigo ideal para hacer actividades al aire libre con ellos, sin embargo, es recomendable educarlos bien desde pequeños, para que obedezcan a las órdenes de sus amos sin que tener que malcriarlos.
Su relación con los niños no es del todo recomendable, pese a que estos animalitos son la inspiración de tiernos peluches, es preferible que se mantengan lejos de ellos, sobre todo cuando éstos no han sido educados para convivir con un Pomerania. El riesgo de que los pisen, lo halen o pellizquen es muy alto, y frente a eso, el perro no va responder con agresividad, pero sin duda que se va a ver molesto y hasta estresado.
Por tratarse de razas pequeñas inteligentes, que aprenden con facilidad y que son animales de alerta, son ideales para ancianos o personas que buscan compañía y tengan tiempo para enseñarle trucos y realice prácticas de entrenamiento con ellos. Para que se mantengan activos y potencien su agilidad, es útil organizar ejercicios con él por lo menos tres veces a la semana, aunque vivan en lugares abiertos, cerrados o pequeños.
Su hermoso pelaje requiere un buen cuidado, para mantenerlo en un buen estado. Su amo debe saber que su doble capa, por ser lacia en su parte interior y áspera en el exterior, va a necesitar cepillados en forma frecuente, así evita la creación de nudos y enredos.
En relación a su salud, pueden llegar a vivir 16 años, sin embargo, es necesario que sus dueños prevengan accidentes o fuertes caídas que les provoque luxación de rótula y problemas en sus discos invertebrales. Así, que hay que tener mucho cuidado con que no suban a lugares altos o trasladarlos mucho en brazos.
¿Te gustaría tener un pomeranio en casa? ¿Te enternece esta raza? ¡Cuéntanos!
Imagen CC Ana Gabriela García Montiel