Si quieres evitar que tu perro se sienta inseguro, amenazado y agresivo cuando se le acerca un animal o persona, evita mimarlo demasiado. Una de las razones de que actúen de esa manera, es porque se acostumbran a los brazos de su dueño, afectando su sociabilidad y relación con su entorno.
Humanizar a nuestros perros no es lo correcto y tenerlos pegados constantemente a nosotros tampoco. Un mascotadicto sabe cuánto ama a su canino y también sabe que tiene la responsabilidad de educarlo y adiestrarlo como corresponde. A veces, cuando los sobreprotegemos más de la cuenta, nuestras mascotas se malacostumbran y adquieren hábitos de desobediencia.
Pamela tiene a 'Óscar', un perro yorkshire de seis años. Lo tiene en su departamento en un buen ambiente junto a sus dos gatos. Es muy hogareño, territorial e inquieto. Los momentos de apego y afecto entre ambos se dan cuando duermen juntos en la cama, cuando Pamela lo saca a pasear y cuando lo lleva, incluso, a lugares cerrados y opta por transportarlo en brazos.
"Óscar es tranquilo cuando lo llevo en brazos, se adapta fácilmente y no hace problemas. Al principio costó un poco, pero ya se acostumbró", cuenta Pamela.
Nuestros perros pueden ser nuestros mejores amigos y convertirse en nuestros partners, pero ¿es conveniente llevarlo siempre con nosotros en brazos? El médico veterinario de la clínica Medical Pets, Héctor Cortés, afirma que: "Razas como los yorkshire, chigaguas o fox terrier, se caracterizan por su temperamento territorial. Toman por objeto a sus amos y a la hora de que otra persona o animal se les acerque, suelen ser agresivos".
Pero en estos casos nos preguntamos ¿quién domina a quién? Cortés advierte que "es responsabilidad del dueño no dejarse controlar por el can, y desde que se tiene a la mascota en casa, se le debe enseñar a que aprenda a sociabilizar con el entorno", argumentando que "por mucho afecto que se le tenga (al perro), siempre debe ser el último en la cadena de la 'manada' donde se encuentra, llamada familia".
"En relación a los yorkshire, chigaguas o fox terrier, se debe tener cuidado con el ambiente del hogar. Estas pequeñas razas creen que son perros grandes, pero su anatomía no lo es", explica el médico veterinario.
Están propensos a que sufran accidentes cuando están en altura, no sólo en nuestros brazos, sino que además cuando están sobre los muebles, camas o sofás, ya que suelen brincar sin medir las consecuencias y pueden terminar con lesiones, tales como fracturas en sus miembros por la excesiva fuerza al recibir el impacto de la caída.
En ese mismo contexto, está el riesgo de que puedan presentar luxaciones en sus articulaciones como en el codo, femoro-tibio-rotuliano o coxofemoral. Si no se tiene la precaución correspondiente, pueden quedar inválidos.
Evita que tu perro sea poco sociable, temeroso y dependiente. Fomenta el ejercicio y la actividad al aire libre para que pueda interactuar con otros animales y personas, y así, aprenda a convivir en ambientes gratos. Si tienes consultas de cómo educar y entrenar a tu perro, no dudes en preguntarle a su médico veterinario.
Imagen CC Rod RC