Particular, por decirlo de alguna forma, es el último trabajo del fotógrafo norteamericano Chris Sembrot, quien para plasmar visualmente el intenso amor que puede existir entre una persona y su mascota, decidió realizar el proyecto “For The Love Of Dog”, en el que retrató a través de la fotografía, la mayor expresión de amor entre un dueño y su perro: un apasionado beso en la boca y al estilo francés, o sea ¡¡¡con lengua!!!
El proyecto llamado “For The Love of Dog” ha causado gran controversia a nivel mundial, ya que pese a todo el cariño que uno pueda sentir por su mejor amigo de cuatro patas, besarlo en la boca es algo que no muchas personas están dispuestas a hacer, por un tema de higiene y también, porque no es muy agradable intercambiar ese tipo de fluidos con un animal.
Si bien, algunas de las imágenes son tiernas y graciosas, hay otras que resultan ser más impactantes. Un ejemplo de esto, es una fotografía donde se puede ver -en primerísimo primer plano- cómo las lenguas de un hombre y su perro se introducen en sus bocas, cosa que por lo menos a mí me parece un poco mucho. Véanlo ustedes mismos:
El artista, que está radicado en Philadelphia y Nueva York, comenta en su blog que "para muchas personas besar a su Gran danés o Dachshund, es solamente otra forma de expresarles su amor", agregando que "para ellos un beso es una manera libre de compartir afecto con sus perros, quienes los aman incondicionalmente".
Por otra parte, el fotógrafo reconoce que para las personas que no tienen mascotas, al ver estas imágenes deben preguntarse "¿dónde habrá estado antes esa boca?", a lo que él responde que gracias a los besos, estos amantes de los animales "están cambiando su propia bioquímica…para mejor".
Pese a que investigadores dicen, que la boca de un perro tiene menos posibilidades de transmitir enfermedades que la de un ser humano y que su saliva previene infecciones, estas fotos parecen más una provocación, que el reflejo de un acto de amor entre perros y personas ¿o no?
Yo adoro a mi perrita "Tifany" y si bien, de vez en cuando le he dado algún beso en la carita, jamás podría dárselo con pasión en la boca, tampoco a mi hijo o a mi mamá. Ese tipo de cosas dejémoslas para los pololos, maridos, pinches o amigos con ventajas ¿no creen?
Fotos CC vía csembrot