Aunque no lo parezca, los gatos son animales muy sociables, por lo que adoptar dos gatos bebés en vez de uno es mucho mejor para su carácter y comportamiento. Hace dos meses traje dos gatitos a mi casa y la experiencia ha sido buenísima. Acá les comparto algunos de los beneficios.
- Mejor adaptación: es muy traumática la separación de su madre y hermanos, pero si en lugar de eso son dos gatitos los que se van a una nueva casa, la adaptación es mucho más sana y veloz.
- Mejor socialización: los gatitos que en un principio pasan demasiado tiempo solos, tienden a ser más “salvajes” y violentos en su adultez. Si un gatito tiene compañía gatuna, además de contacto habitual con humanos, su agresividad será menor y relacionarse con otros felinos en el futuro no será algo extraño.
- Más diversión: si jugar con un gato es divertido, imagina hacerlo con dos a la vez. Los gatos que se crían con sus hermanos son mucho más juguetones. Además, cuando interactúan entre ellos, es todo un espectáculo.
- Más compañía: aunque suene obvio, vivir con más seres implica mayor compañía. En el caso de los gatos, no tan sólo será más compañía para ti, sino que también para ellos. Si eres de los que pasa poco tiempo en casa, es más recomendable que adoptes dos felinos, de esa forma entre ambos se acompañarán.
- Algunos contras: obviamente tener dos gatos implica el doble en muchas cosas, como el doble de cajas de arena, gasto en comida y veterinario y el doble de cuidado. Otro problema es que si son macho y hembra intentarán reproducirse (¡aunque sean hermanos, los gatos no tienen pudor!). Lo más recomendable en este último caso es castrarlos antes de su primer celo.
- Dos no son multitud: aunque el gasto es el doble, el tiempo de dedicación no se duplica. Alimentar a un gato es lo mismo que alimentar a dos, pero puedes jugar con ambos al mismo tiempo y las idas al veterinario son conjuntas. Sopesando pros y contras, se gana mucho más de lo que se pierde cuando hay dos gatos en casa.
¿Te animas?