Cuidados para mantener sanos y felices a los erizos de tierra

¡Qué lindo son los erizos de tierra! Pequeñitos y escurridizos...

Sin embargo, aunque desde pequeños los manipules, ellos siempre serán solitarios. Si te interesa tener uno o ya lo tienes, a continuación te comentamos cuáles son los cuidados para mantenerlos sanos y felices. La variedad más común es la especie africana pigmea (Atelerix albiventris), la cual se caracteriza por ser pequeña (no excede los 16 cms.) y pesan entre 300 y 400 grs. Ellos no hibernan y son de hábitos nocturnos. Les gusta la soledad, pero en época de celo, se acercan al sexo opuesto para reproducirse. Como se dijo, pueden ser hostiles, pero más los machos que las hembras.

Cuando se tienen en cautiverio, necesitan de los siguientes cuidados: pueden vivir en cajas de plásticos o terrarios de mínimo 50x50 cms. La temperatura debe ser entre 24 y 30°C. De ser de menos 18°C, se arriesga a enfermedades. El sustrato (o suelo de la cajita) puede ser papel de diario, pero debe cambiarse con frecuencia. Además, debe tener un refugio y una rueda para ejercicios (especial para erizos), aunque puede que no la use.

En cuanto a la alimentación, se recomienda darle la comida justa, puesto que si come en demasía le puede dar diarrea. Igualmente, se puede utilizar alimento para gatos de buena calidad, ya que son omnívoros. Se le puede agregar también carne magra de pollo, pavo o pescado, huevos cocidos y algunas frutas como melón, sandía y manzanas, pero jamás uvas, cebollas, paltas y frutos secos. Si quieres darle insectos para balancear su dieta, es mejor que sean de criadero, para evitar enfermedades o químicos dañinos para tu mascota.

Otro cuidado es evitar el contacto con animales que puedan contagiarle garrapatas. De tenerlas, será necesario utilizar spray antipulgas y garrapatas para gatos. Por otro lado, si quieres cruzarlo, se debe hacer preferentemente después de los seis meses de vida. Los futuros padres deben estar sanos y no tener ningún lazo sanguíneo, para evitar problemas congénitos y malformaciones. La hembra primeriza no debe superar el año y medio de edad. Y se debe cuidar la alimentación de madre para evitar descalcificaciones.

Finalmente, no olvides visitar a un médico veterinario especializado para asegurarte que tu pequeña mascota esté saludable y feliz.

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