¿Se imaginan alimentándose de insectos? Por increíble que parezca, la FAO, Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación, presentó hace aproximadamente un mes el informe “Insectos comestibles: perspectivas de futuro para la seguridad alimentaria y alimentación para el ganado”.
Son más de 2.000 millones de personas las que ya los han incluido en su dieta alimentaria, no sólo por lo abundantes que son, ya que los bosques los producen en grandes cantidades, sino también por su valor nutritivo –gran cantidad de proteínas y hierro, incluso más que la carne de vacuno-.
Eva Muller, coautora del informe, estableció en un comunicado que no se estaba postulando que necesariamente deberíamos comer insectos, sino que más bien aprovechar su potencial nutritivo como alimento y como pienso, alimento seco para ganado.
Además, en el informe se mencionan los beneficios ambientales que puede conllevar la cría de insectos: evitar la sobreexplotación forestal, disminuir la emisión de metano, amoniaco, gases de efecto invernadero y estiércol, como también ayudar a descomponer desechos por medio del compostaje; proceso que devuelve los nutrientes a la tierra y reduce los malos olores.
Aún así, las leyes de muchos países prohíben estas prácticas, por lo que la FAO apuesta a investigar más para en el futuro poder aprovechar la cría de insectos y el vertido de residuos.
Muller agrega que los animales silvestres y los insectos son parte fundamental de la alimentación de los habitantes de zonas forestales, como también las hojas, semillas, hongos, miel y frutas, que completan una dieta equilibrada y nutritiva.
¿Será que los insectos formarán parte de nuestra alimentación diaria en el futuro?
Los insectos, ¿el alimento del futuro?
Publicado
por
Camila Hidalgo