Para algunos no es una novedad que se pierda misteriosamente una prenda de ropa en la casa. Menos que los zapatos de descanso desaparezcan por arte de magia. Es que cuando se tiene a un perro, especialmente si es cachorro, es muy probable que su hobby favorito sea morder y robarse todo lo que pille alrededor, incluyendo las pantuflas. Sin embargo, no hay que volverse loco por la nueva travesura que tanto entretiene a tu mascota, ya que de una forma u otra, siempre existen distintas maneras para que tus cosas no queden con pedazos menos y listos para el tacho de la basura.
Primero, para que tu amigo de cuatro patas no intente robar todo lo que está a su alrededor hay que comenzar por criarlo adecuadamente desde pequeño. Al primer indicio de jugueteo con cosas del hogar se le debe enseñar que no lo tiene que hacer. Es importante que entienda lo que es bueno y posible de realizar y lo que no, para eso, con cariño y tiempo se le deben inculcar modales para que cada día sea más fácil la convivencia.
Es natural que a tu mascota le guste jugar con tus pantuflas, entiende que tirarla y morderla debe ser una gran entretención para él. Sin embargo, para que no te destruya todo, cómprale juguetes de goma y tela que lo diviertan. Hay una gran cantidad de opciones de los más variados precios y generalmente, los venden en el supermercado y hasta por internet. Con esto, ya vas a ver que poco a poco tu can se olvida de tus destrozados zapatos.
También, puede ser que tu perro sea destructivo por la sencilla razón de que está estresado. Muchas veces pasa que estar dentro de cuatro paredes angustia a estos animales. Lo bueno, es que la solución es tan simple como dedicar unos veinte minutos para sacarlo a pasear por tu barrio. Si no tienes tiempo, has turno con los demás miembros de la familia.
“Cuando mi cachorro llegó a la casa solo se dedicaba a masticar todo lo que veía, fue tanto que nos empezamos a preocupar por él. Un amigo me dijo que podía ser que estuviera estresado, fue ahí cuando nos dedicamos a jugar más con él y sacarlo a pasear. Así, cambió sus rabietas de un día para otro”, comenta Carolina Navarro quien tiene un Yorkshire de cuatro años.
Aunque las razones por las que tu perro muerde tus cosas pueden ser por diferentes factores eso no significa que hay que rendirse. Solo hay que saber enseñarle y tener la paciencia para hacerlo. También, es posible que esto solo sea una manifestación de que desea tu atención, por lo que será necesario que le dediques más tiempo y que compartas más con tu fiel amigo. Por eso, sé comprensivo y no te enojes a la primera pantufla perdida.
Y tú, ¿lograste que tu perro no muerda tus zapatos?