Alimentos prohibidos para tu perro

Nuestros perros son unos “loquillos”, aún más cuando son cachorros y andan correteando de un lado a otro. Cuantos de nosotros no hemos lamentado alguna pertenencia (que por desgracia) llegó a su hocico) y no la volvimos a ver nunca más. La misma situación ocurre con los alimentos, ya que, al más mínimo descuido puede desaparecer lo que estabas comiendo y llegar al estómago de tu can.

A medida que va creciendo nuestro mejor amigo, lo vamos alimentando con diferentes tipos de alimentos. Algunos prefieren la comida casera, mientras que la gran mayoría se inclina por los pellets, que son más saludables para ellos. A pesar de alimentarlos con comida elaborada, siempre uno les da de comer alguna cosa “rica” para ellos, como un pedazo de pan o algo por el estilo.

En Mascotas.cl, nos preocupamos por tus perros y te dejamos un listado con los alimentos QUE POR NADA DEL MUNDO debe comer tu animal.

Ajo: Lamentablemente para nuestras mascotas, el ajo contiene tiosulfato, lo que al ser consumido en exceso puede provocar anemia a los perros. Este elemento puede destruir glóbulos rojos, lo que hace que los órganos vitales de nuestra mascota, no reciban el oxígeno necesario. Algunos síntomas de esta intoxicación son diarrea y vómitos, pérdida de apetito, dificultad respiratoria o sangre en la orina.

Cebolla: Provoca los mismos malestares que el ajo, pero la cebolla es aún más dañina, ya que, tiene una concentración de tiosulfato aún mayor.

Chocolate: Esta delicia para los humanos, es un verdadero veneno para nuestros “regalones”. Este alimento contiene teobromina, sustancia tóxica para los perritos, lo que les provoca, diarreas, jadeos, hiperactividad e incluso paro cardíaco con consecuencias fatales.

Palta: Este alimento rico en grasas, contiene persin, que es una especia de ácido graso y es tóxico para tu “amigo de cuatro patas”. Así que ya sabes, nada de convidarle pan con palta por mucho que ladre o se haga la víctima.

Huesos: La mayoría de los amos, le hemos dado algún hueso alguna vez a nuestra mascota, pero es mejor que no se haga en exceso. Los huesos podrían provocar en la mascota graves problemas al sistema digestivo, sumado al desgaste en la dentadura, heridas en la boca e incluso hemorragias estomacales.

Leche: Muchos de los que recién tienen perros, cometen el error de dar leche a los cachorros. Grave error, puesto que, la mayoría de los perros padecen intolerancia a la lactosa, ya que, carecen de enzimas que digieran los lácteos.

Cerveza: Nunca está demás advertir a los “graciosos” que con unos tragos de más comienzan a darle bebidas alcohólicas a nuestros perros. Los efectos del alcohol en los perros son mucho más pronunciados que en un ser humano. Pueden volverse muy nerviosos, atacar a alguien o incluso a sí mismos.

Así que ya sabes, sigue estos simple consejos y no te dejes llevar por sus caras tiernas y aullidos, cuando quieren pedirte un poco de lo que estás comiendo.

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