Si bien en algunos países de Norte, Centro y Sudamérica, el secuestro es una figura delictual que aplican muchos malhechores para obtener dinero a cambio de sus víctimas, ahora salió al ruedo una nueva derivación, “el secuestro de mascotas”. El crimen organizado está tomando de rehenes a mascotas de razas finas y de familias acomodadas, con el fin de pedir dinero por su “regalón”.
En México, específicamente en la provincia de Yucatán, han desaparecido gran cantidad de animales pertenecientes a personalidad de aquella localidad. El auge de la venta de mascotas y la falta de una tecnología sostenible para encontrar a los animales perdidos son dos de las causas que han favorecido la posibilidad de una nueva modalidad de secuestro, como lo es el “robo exprés” de mascotas en barrios y colonias de familias pudientes.
Se estima que el valor de los rescates va desde los mil a tres mil dólares. Las cifras oficiales informan que este tipo de secuestro de mascotas se ha incrementado en un 50% respecto a los 20 últimos años, debido principalmente a la venta indiscriminada de canes de raza y la falta de una regulación jurídica al respecto.
Los registros informan que uno de cada diez perros extraviados, es robado o secuestrado aprovechando el descuido o la ausencia de sus dueños. Jorge Canto Ureña, juez calificador de torneos internacionales y miembro de la Federación Canófila de México, dio señales de cómo es el modo de operar de estas bandas. “Desafortunadamente, en este caso el secuestrador no se comunica con el dueño, sólo espera la publicación por la recompensa, que cada vez son más jugosas, especialmente si se trata de mascotas de gente pudiente o adinerada”, señaló.
Uno de los casos emblemáticos fue la oferta que hiciera hace algunos años Elba Esther Gordillo, líder del SNTE, quien usó anuncios en cuatro camionetas modelo Hummer buscando a su mascota, un perro Papillón, el cual se extravió en San Diego, California. Las fuentes oficiales señalan que la estrategia de los secuestradores tiene éxito, porque de cuatro perros extraviados o robados, dos regresaron a sus hogares, previo pago a sus “rescatistas”.
¿Y tú hasta cuanto estarías dispuesto a pagar por el rescate de tu mascota?
¿Secuestro de mascotas?
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Mascotadictos