Mascotas: Amigos y terapeutas para niños

Los estudios sobre animales no dejan de sorprendernos. Según Dieter Krowatschek, autor del libro “Los niños necesitan animales de compañía”, todos los infantes deberían tener dos cosas: un perro y una madre que los deje tener un perro”, y no es sólo por tener una mascota, sino porque está comprobado que los niños que tienen un can u otro animal de compañía, llevan una vida más equilibrada, asumen responsabilidades y aprenden a relacionarse con la gente con mayor facilidad.

En nuestro país, hay muchos niños que pasan todo el día solos, o salen del colegio y se van directo a la casa a ver tele o a jugar en el computador, por esta razón, es recomendable que tengan una mascota con la cual puedan interactuar, jugar y compartir.

Los perros son animales ideales para acompañar a los niños, ya que entregan amor y cariño a sus dueños, sin hacer juicios ni discriminaciones. Es así como nos cuenta su experiencia Mónica Vera, quien por horario de trabajo, no puede estar con su hijo en las tardes: “El psicólogo de mi niño me recomendó tener una mascota, no tan sólo por acompañía, sino que también para que tenga responsabilidades,así, lo ayudará a crecer y a desarrollarse personalmente, luego del cambio de casa que lo afectó negativamente”.
El proceso de selección de una mascota no es fácil, pues debemos tener en cuenta que le entregaremos toda la responsabilidad de ella a un niño, dentro de éstas: alimentarlo, pasearlo, bañarlo, etc.

Entre las razas preferidas están el Labrador y el Golden Retriever, los que se destacan, sobre las otros, por a su apariencia amigable y buen carácter; lo que no quiere decir que sólo podamos tener de este tipo de canes. Aunque no lo crean, los pitbull, rottweiler, dobermann o bóxer (ojalá sin orejas ni cola cortada), si adquieren una buena educación desde cachorros, resultan ser una excelente compañía para los niños.

Un buen adiestramiento es ideal, tal vez no estricto, pero sí con reglas básicas como: obediencia, que se siente, dé la mano, entre otras. Además, la familiarización que tenga el animal con el niño, desde muy pequeño, resulta fundamental a la hora de entablar un lazo de confianza entre los dos.

Así que ya lo saben, si tienen hijos y quieren entregarles una infancia llena de aprendizajes, compañía y vitalidad, una mascota representará una gran experiencia en su crecimiento. Ustedes, ¿Tienen alguna experiencia?


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